Las ayudas del Gobierno al alquiler por el coronavirus.
El Consejo de Ministros ha aprobado un paquete de medidas en materia de alquiler en situación de vulnerabilidad debido al coronavirus. Por este motivo, se suspende todos los desahucios y se darán microcréditos a interés cero para todos aquellos inquilinos que lo necesiten, a devolver en 6 años o en 10 años en caso de dificultades. También se suspenderán todos los cortes de suministros para este mismo colectivo.
El vicepresidente social del Gobierno, Pablo Iglesias, ha anunciado un paquete de medidas para proteger el derecho a la vivienda, uno de los objetivos centrales y algo imprescindible porque es la trinchera desde la que se resiste al virus.
Prórroga de los contratos de alquiler
El gobierno ha comunicado también la prórroga automáticamente y de forma extraordinaria de los contratos de alquiler de vivienda habitual que caduquen en los tres meses posteriores a la entrada en vigor del estado de alarma y para un período de seis meses. Esta medida es para evitar las subidas abusivas de los precios aprovechando la crisis del COVID-19.
Iglesias ha destacado que las medidas buscan ofrecer seguridad y protección a todas las personas para afrontar el impacto negativo de la crisis y ha subrayado las medidas para ofrecer el «derecho constitucional» de la vivienda, un bien «más imprescindible» ahora al ser la «trinchera» desde la que los ciudadanos se protegen del virus, tras pedirles que permanezcan en casa para evitar contagios.
En concreto, se ha aprobado la suspensión de lanzamientos sin alternativa habitacional hasta que se cumplan seis meses tras el fin del estado de alarma para que «nadie se quede sin casa durante la crisis», así como una prórroga extraordinaria de seis meses de los contratos de alquiler de vivienda habitacional para evitar subidas abusivas aprovechando el Covid-19.
Además, ha indicado que, conforme al real decreto-ley aprobado, quien caiga en situación de vulnerabilidad puede acogerse a un microcrédito. Esta ayuda se dará el estado a tipo 0 de interés, a devolver en 6 años ampliable a 10 en caso de dificultades.
A su vez, se recoge una definición «muy amplia» de los supuestos de vulnerabilidad para acogerse al sistema, sumado a facilidades para devolución de los mismos créditos, lo que permitirá que un «gran número» de personas con dificultades puedan acogerse, como por ejemplo los parados, los trabajadores inmersos en ERTE o reducción de jornada o autónomos con ingresos reducidos como consecuencia del Covid-19.